Este mes, en los Concejos Deliberantes de toda la provincia de Bs. As. se deben tratar las rendiciones de cuentas de los gobiernos municipales. Y los integrantes del bloque de Concejales del PJ-Unidad Ciudadana, denunciaron las dificultades para desarrollar la tarea de análisis del estado contable y económico del Municipio ya que "accedimos a información parcial e insuficiente, se han incumplido todas las normas en materia de acceso a la información por parte del Departamento Ejecutivo, de manera intencional, impidiendo a los representantes del pueblo cumplir plenamente con dicho análisis”.

Las declaraciones fueron realizadas por la Presidente del bloque, Soledad Calle, quien además agregó que “esta negativa por parte del Gobierno no sólo es en perjuicio de nuestra tarea como concejales, sino que estos funcionarios públicos les siguen ocultando información a los vecinos. Datos valiosos para saber de qué manera gasta el dinero de los campanenses, cuál es la situación económica financiera del Municipio, el endeudamiento y los compromisos asumidos que, en definitiva, luego pagamos todos. Y fundamentalmente, se ocultan dos años de asignación discrecional, a dedo y sin licitación, de más de 200 millones de pesos en obra pública”.

Por su parte, el Concejal Rubén Romano aseveró que “a contramano de lo que sucede en otros municipios, incluso macristas como Pilar, donde las políticas de gobierno abierto y open data son moneda corriente, me sorprende el ocultamiento manifiesto de la información económica y financiera del municipio de Campana. La administración de los recursos de los vecinos debe darse con el mayor grado de claridad, y hoy vemos una política de transparencia cero".

Desde el bloque justicialista enviaron una nota al Jefe Comunal, la cual hasta el momento no ha sido contestada. “Tanto nosotros como los vecinos queremos conocer la forma en que se administran los  recursos públicos, los criterios de selección de proveedores de las grandes compras y contrataciones, que en su mayoría no son de la ciudad y que en muchos casos comenzaron sus actividades después de asumido este gobierno. Lamentablemente, estas maniobras no benefician a nadie: por un lado complican el ejercicio responsable del rol de concejal y por otro, tienden un manto de dudas y de sospechas sobre la administración municipal, que daña su legitimidad. Y es peor aún, porque si en la división de poderes le corresponde al Concejo la función de control de la administración, lo que se está dañando es la propia Democracia" concluyó Romano.