"El campeón volvió, el campeón volvió" cantaron 100.000 personas, bajo la lluvia y en lágrimas en el estadio Arena Condá de Chapecó, en el sur de Brasil, al recibir el cortejo fúnebre con los restos de 50 personas, 19 futbolistas del Chapecoense, cuyo avión cayó el lunes por la noche en Colombia.

La ceremonia se realiza en el campo de juego con la presencia de autoridades y honores militares, familiares de las víctimas de la caída del avión que llevaba a los jugadores hacia Medellín a jugar la final de la Copa Sudamericana.

El velatorio se realiza bajo una tienda con la inscripción: "En las alegrías y en las horas más difíciles mi huracán es siempre un vencedor. Gracias, Chapecoense, Atlético Medellín".

Las hinchadas organizadas de varios clubes, presentes en una demostración inédita de unidad, cantaban todas por Chapecoense, lanzando bengalas verdes y blancas.