El dirigente social Guillermo Varela se refirió a uno de los temas más controversiales de la actual agenda política: el asistencialismo estatal. Lo hizo de forma detallada, minuciosa, en el afán de luego dar su visión sobre el proyecto de creación de un Salario Básico Universal (S.B.U.), presentado por el Frente Patria Grande –perteneciente al Frente de Todos- y que va sumando adeptos en el oficialismo, entre ellos el de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
‘’Los planes sociales nacieron de una emergencia y luego de un reclamo que llevó adelante en los noventa el movimiento de desocupados. En esa época, 300 mil familias perdieron sus puestos de trabajo producto de las numerosas privatizaciones de empresas del Estado ejecutadas durante los gobiernos de Carlos Menem. Para ser exactos, nacieron luego de las Puebladas de Cutral Có y Plaza Huincul de 1996 y 1997, que fueron motivadas por los despidos masivos en Y.P.F. Allí en el sur, la empresa tenía 36 mil empleados. Tras la privatización, 30 mil de ellos quedaron en la calle. Esos primeros planes sociales fueron para socorrer a los despedidos’’, comenzó explicando Varela.
‘’El problema es que pasaron 30 años y seguimos hablando de planes sociales’’, explicó el dirigente del Frente de Todos, y agregó: ‘’Esto sucede porque evidentemente la política no pudo resolver el problema del empleo. Porque Argentina no implementó hasta ahora un modelo económico que ponga en el centro de la discusión a la creación de empleo. Entonces hoy nos encontramos con que tenemos 1.200.000 de planes sociales, y vecinos y vecinas de Campana que hace 20 años que cobran un plan social’’.
Para Varela, resulta paradójico que la Argentina, ‘’teniendo crecimiento económico y una actividad económica a pleno, tenga a seis de cada diez pibes y a la mitad de la población en situación de pobreza’’. ‘’Esto prueba que el problema no son los planes sociales: el problema es el modelo. El problema no son los desocupados: el problema es el modelo económico que concentra la riqueza en pocas manos’’, aseguró vehementemente.
Es por esto que el referente de Somos Barrios de Pie en Campana está convencido de que, para poder terminar con la problemática de los planes sociales, debe concretarse el proyecto del S.B.U. Éste se plantea el objetivo de establecer un piso mínimo de ingresos para toda persona entre los 18 y los 65 años que esté sin trabajo, empleada informalmente, o con escasos ingresos. ‘’El S.B.U. garantizará reducir al máximo los niveles de indigencia. Proyecta una Argentina en la que nadie debería alcanzar los niveles de pobreza como los que experimentamos hoy’’, señaló.
La Asignación Universal por Hijo (A.U.H.) y las jubilaciones a través de moratorias son, para Varela, dos ejemplos exitosos de ingresos universales que se implementaron ‘’gracias a las políticas de Néstor y de Cristina’’ y que cumplieron -y aun cumplen- una función igualadora: ‘’El proyecto nacional y popular hizo justicia social: con la A.U.H. aseguró un plato de comida y una oportunidad donde en los noventa había hambre y exclusión, y con las moratorias se reconoció el esfuerzo y los derechos de quienes trabajaron en negro gran parte de su vida laboral, víctimas muchas veces de empleadores inescrupulosos’’.
‘’Es por eso que las organizaciones apoyamos el proyecto del salario universal. Con su implementación, evitaremos la intermediación, explicó Varela. ‘’El S.B.U., además, pondrá a las organizaciones sociales como motores del desarrollo económico en el sector de la economía popular, como impulsoras de proyectos productivos, y ya no como administradoras de planes sociales’’, agregó.
Como cierre, el referente del Frente de Todos local pidió a la flamante ministra de Economía, Silvina Batakis, que haga ‘’lo que tenga que hacer’’ para que el S.B.U. sea una realidad. ‘’Néstor y Cristina nos dejaron muy en claro que la mejor forma de salir de las crisis es ampliando derechos’’, concluyó.