La apuesta por el ganado ovino sufrió un revés con la crisis que la actividad vivió hacia 1874. Pero si toda crisis es una oportunidad, la misma fue aprovechada por los hermanos Costa para lotear parte de su establecimiento y hacer realidad el pueblo de Campana.

Pero si hubo un factor decisivo en el nacimiento de Campana, fue la llegada del ferrocarril. En 1870 el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires le ofreció al empresario naviero Guillermo Matti la concesión de la obra. Aunque recién la "Compañía del Ferrocarril a Campana" se constituyó en 1874, hay referencias a las obras en el periódico "El Monitor de la Campaña", de Capilla del Señor, que dan cuenta de novedades vinculadas al movimiento de gente que había en las tierras de los Costa, aún pertenecientes al Partido de Exaltación de la Cruz: 

"Campana. Ese importante punto de nuestro partido es a menudo el teatro de desórdenes: el 22  del presente [Mayo de 1872] trajeron de allí un individuo gravemente herido por otro. La repetición de semejantes hechos, su población que deben aumentar todavía los trabajos del ferrocarril y la distancia que separa Campana de la Exaltación de la Cruz, hacen necesario el establecimiento de una guardia policial..."

Después de numerosos inconvenientes, la mayoría de ellos vinculados a conflictos relacionados con la expropiación de tierras a lo largo del trayecto, en Enero de 1876 finalizaban las obras, cuando las dos cuadrillas que venían trabajando, -una desde Campana y otra desde Retiro-, cruzaron su trabajo el día 12 de Enero de 1876 bajo una lluvia torrencial. Al día siguiente, autoridades nacionales y empresarios ferroviarios realizaron el primer viaje.

Finalmente, en Abril de 1876 se inauguró formalmente la línea.

Desde entonces y hasta que se inauguró la ampliación de la línea hasta Rosario, los pasajeros de aquella ciudad llegaban a Campana en barcos, y hacían el transbordo al ferrocarril en Campana. Mercaderías, correspondencia y pasajeros nutrieron ese intenso movimiento en ambos sentidos. Muchos productores rurales acercaban su producción hasta el pueblo recién nacido para aprovechar las ventajas del nuevo medio de transporte.

Gracias al Ferrocarril, Campana se convirtió en un polo atractivo para inversiones de todo tipo, como el Frigorífico River Plate Fresh Meat Co. entre muchas otras. El movimiento de pasajeros, dio paso a la llegada de inmigrantes de múltiples nacionalidades.

Ni siquiera el traslado de los talleres ferroviarios a Rosario, en los albores del siglo XX pudo frenar el impulso progresista de Campana, convertida, según algún cronista, en "la Manchester Argentina".